CARTELERÍA
Tras "Con la muerte en los talones"(1959)(Ver Cartelería en AGOSTO 2019), Hitchcock tenía pensado hacer una película con Audrey Hepburn y Laurence Harvey titulada "No Bail for the Judge". La actriz pidió unos días para leer el guión y se fue a Suiza desde donde comunicó que estaba embarazada y que le sería imposible interpretar la película. El director montó en cólera y canceló inmediatamente el proyecto ante la sorpresa general
Posiblemente este hecho fue la gota que colmó el vaso y a partir de entonces en su filmografía inicia una tendencia, inédita en sus 35 años como director, de agresión física a personajes femeninos, que se manifiesta ya plenamente en "Psicosis" y proseguirá en sus películas sucesivas
Comento esto porque antes de empezar la producción de "Psicosis", Sir Alfred, dirigió uno de sus famosos episodios televisivos de la serie "Alfred Hitchcock Presenta", en el que ya apuntaba maneras.
Se basaba en un cuento de Lord Dunsany y se titulaba "Arthur". Para protagonizarlo escogió a Laurence Harvey, casualmente el actor que iba a protagonizar con Hepburn la peli cancelada, y en él vemos como estrangula a una mujer, reduce su cuerpo a pedacitos y se los echa de comer a sus gallinas
¿Fue un gesto de venganza provocado por su despecho acumulado ante lo que consideraba la traición inexcusable para él, Pigmalión desairado, de sus actrices? Sería arriesgado asegurarlo, lo que si está claro es que el trato hacia las chicas de sus películas cambia a partir de este momento
Joan Harrison, colaboradora de Hitchcock desde 1935, le envió las galeradas de una novela aún no publicada de Robert Bloch, autor de varios relatos que ya se habían utilizado en "Alfred Hitchcock Presenta". La novela se titulaba "Psicosis" y lo que más atrajo al director fue el efecto sorpresa que podría mostrar en el film al convertir en víctima a la actriz principal
Hitchcock compró los derechos de la novela de forma anónima a Robert Bloch por 9.000$ y cuando se publicó, compró tantas copias de la novela como pudo, para mantener el final de la historia en secreto
El director fichó de guionista al joven Joseph Stefano al que le insistió que respetase la intriga principal. Stefano le sugirió a Hitchcock que los personajes debían ser más simpáticos que en la novela
En la novela, Norman Bates es bajo, gordo, mayor y muy desagradable. Hitchcock decidió que fuera joven, guapo y comprensivo. También es el personaje principal de la novela. La historia comienza con él y su madre peleando, en lugar de seguir a Marion desde el principio como ocurre en la película
Mientras escribía el guión, Joseph Stefano estaba en terapia lidiando con la relación con su propia madre. Hitchcock también había sufrido el dominio de una madre posesiva y exigente. Aunque consiguió imponer una imagen de poder y control absoluto sobre su vida y su arte, la realidad es que era un hombre inseguro, atormentado e infeliz
Hitchcock estaba un poco harto de las películas de gran presupuesto plagadas de estrellas que había estado haciendo últimamente. Así que decidió rodar "Psicosis" de la manera más simple y económica posible, como si fuera uno de sus telefilms. Haría la peli en blanco y negro, que además de abaratarla le restaría truculencia a la presencia de la sangre en el asesinato bajo la ducha y se rodearía del equipo técnico habitual en sus producciones televisivas
Las malas lenguas dicen que la rodó en blanco y negro porque tenía una especie de pique con el director de cine negro Henri-Georges Clouzot. Unos años antes el director francés había filmado una película independiente, de bajo presupuesto y filmada en blanco y negro titulada "Las Diabólicas"(1955) que había sido todo un éxito de taquilla y que rápidamente la crítica dijo que había superado a Hitchcock. Este comentario presentó una confrontación que Sir Alfred no podía rechazar. Así que con el fin de superar al director galo, dirigió su propio proyecto de bajo presupuesto en blanco y negro
Hitch tenía tanto interés en hacer la película que le propuso al estudio cambiar su salario estándar de 250.000$ por el 60% de los ingresos brutos del film. Paramount Pictures creyendo que la película iba a ser un desastre en la taquilla, estuvo de acuerdo.
"Psicosis" tuvo un presupuesto final de 806.947$ y las ganancias personales que tuvo el director gracias a ella excedieron los 15.000.000$. Fue la película más taquillera de su carrera
Anthony Perkins fue siempre la primera opción para el papel de Norman Bates. El actor recibió un salario de 40.000$ y como estaba deseando trabajar con Hitchcock, aceptó el papel antes de leer el guión.
Para el papel de Marion Crane pensaron en Eva Marie Saint, Shirley Jones, Lee Remick, Piper Laurie y Angie Dickinson pero Hitch, a última hora, le envió la novela a Janet Leigh con la promesa expresa de que su personaje sería sustancialmente ampliado y mejorado, como así ocurre en el film
Janet Leigh también estaba loca por trabajar con Hitch y aceptó la propuesta. Cobró 25.000$ por trabajar tres semanas en la peli y pasó una de ellas filmando la famosa secuencia de la ducha. Para esta escena que tan solo dura 45 segundos en la película, el director utilizó 70 ángulos de cámara diferentes.. Sin lugar a dudas es la secuencia culminante del film, una de las más famosas y estudiadas de la historia. Un ejercicio magistral de composición y montaje que transformó por completo los estándares de violencia consentidos en la pantalla hasta ese momento
Hitchcock propuso para el papel de Sam Loomis a Stuart Whitman, Rod Taylor o Cliff Robertson pero Paramount tenía en nómina a John Gavin y se lo impuso al director.
Felicia Farr, Carolyn Jones y Eleanor Parker fueron consideradas para el papel de Lila Crane pero Hitchcock tenía una especie de contrato con Vera Miles y no dudó en asignarle el papel.
Completan el reparto principal Martin Balsam como el detective Arbogast y John McIntire como el sheriff Al Chambers. Dos secundarios de lujo de los que hemos visto en mil películas
Paramount había alquilado a Universal los Revue Studios, donde Hitchcock filmaba habitualmente los episodios de su serie de TV. Entre el 11 de noviembre de 1959 y el 1 de febrero de 1960 se llevó a cabo el rodaje del film. La película se realizó en el mayor de los secretos, y en el espacio reservado en la claqueta para el título no ponía Psicosis sino Wimpy (el nombre del amigo de Popeye) para que a nadie se le ocurriera leer la novela de Robert Bloch que acababa de aparecer
La casa de los Bate se inspiró en una pintura del Museo de Arte Moderno de la ciudad de Nueva York. El lienzo se llama "House by the Railroad" y fue pintado en 1925 por el artista estadounidense Edward Hopper.
El decorado de la casa fue el más caro de la peli y apenas costó 15.000$. Hoy sigue siendo parada obligatoria para todos los visitantes de los estudios Universal en California
Para el estreno Don Alfredo insistió en que no se permitiera la entrada al público en el cine una vez comenzada la proyección. La campaña de publicidad, inteligente y agresiva, pretendía claramente intimidar al espectador.
El estreno mundial fue en Nueva York el 16 de junio de 1960 y en España se estrenó el 21 de febrero de 1961 y como he dicho antes, fue un auténtico pelotazo en la taquilla convirtiéndose en el mayor éxito comercial en la carrera del director
Terminado el rodaje Hitchcock no estaba muy satisfecho de la película, incluso llegó a pensar en editarla para uno de sus episodios de TV. El director había concebido la escena de la ducha sin música, pero Bernard Herrmann le reservaba una grata sorpresa a Hitchcock, porque desobedeciendo a Don Alfredo, él si había compuesto música para esa escena dentro de su espectacular banda sonora . Fue después de ver la película con su partitura, incluida la secuencia de la ducha, cuando se dio cuenta de que el film funcionaría.
Quedó tan satisfecho del trabajo de Herrmann que duplicó el salario del compositor que cobró 34.500$ por componer una inolvidable partitura interpretada íntegramente por instrumentos de cuerda
Hitchcock probó el miedo que podía provocar el cadáver de la madre colocando la momia en el camerino de Janet Leigh y escuchando el fuerte alarido que dio cuando lo descubrió allí.
En fin, ya no solo por la secuencia de la ducha, que es una escena feroz en su brutalidad, sobrecogedora por su brusquedad y el más horrendo asesinato hasta entonces visto en una pantalla. Exquisita en su ejecución fue, en su momento, la última palabra en muertes violentas cinematográficas. Justifica plenamente la famosa frase de Truffaut: "Hitchcock filma las escenas de amor como si fueran asesinatos y los asesinatos como si fueran escenas de amor".
El caso es que "Psicosis" continua ejerciendo un inexplicable pero implacable dominio sobre la libido y las emociones del público. Con la mayor naturalidad del mundo, el director, nos hace pasar del entorno más vulgar y cotidiano a un mundo fantástico donde ya todo es posible.
La minuciosidad con que describe a Marion en el lavabo de señoras separando el dinero para pagar el automóvil (incrementando así la complicidad del espectador con ella) o la escena de la limpieza del baño, donde Norman, hijo devoto que procura proteger a su madre, hace desaparecer todo vestigio del crimen cometido, son dos escenas en las que Hitchcock rompe con audacia las reglas establecidas del género, al obligar al público a identificarse con una ladrona primero y con el encubridor de un asesinato después. Eso es una magnífica demostración de lo que Don Alfredo entiende por tempo, una prueba definitiva de su control magistral de la narración y del espectador en esta película.
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