EL SILENCIO DE LOS CORDEROS (The Silence of the Lambs, 1991)

 CARTELERÍA

 

            Con "Psicosis"(1960)(Ver Cartelería en AGOSTO 2020), Alfred Hitchcock introdujo el rol del asesino en serie en el cine serio. Hasta entonces los psicópatas y demás fauna destripadora habían sido relegados a películas de serie B y de bajo presupuesto firmadas, en el mejor de los casos, por eficientes profesionales

            Con "El Silencio de los Corderos", Jonathan Demme presentó al público, un personaje extremo pero muy creíble, que además de hacerlo entrar en el cerrado círculo de personajes cinematográficos inmortales, lo convirtió por aclamación popular en el malo más malo de la Historia, en el nº 1 de los villanos del celuloide: el Doctor Hannibal Lecter, para los amigos, Hannibal el Canibal

            Y digo esto, porque aunque el personaje se había presentado en un buen film de Michael Mann titulado "Hunter"(Manhunter, 1986) que pasó sin pena ni gloria por la cartelera, no fue hasta que apareció en la película de Jonathan Demme, que el Dr. Lecter obtendría este incuestionable reconocimiento popular que lo auparía a lo más alto del escalafón de tipos turbios

            Thomas Harris publicó "El Silencio de los Corderos" en 1988. La novela era una secuela de su obra anterior "Dragón Rojo" publicada en 1981, donde aparecía el personaje de Hannibal Lecter por primera vez
 

            Con estas novelas, el escritor, además de ofrecer unas horas de angustioso entretenimiento,  quería ahondar en el tema de los asesinos en serie, para lo que estuvo investigando durante años antes de ejercer como periodista al servicio de "Associated Press".

            Desde los sistemas empleados por el F.B.I. hasta el sentimiento de autorepulsa que desarrollan algunos asesinos después de haber matado y que les lleva a cometer un nuevo asesinato, Harris empleó varios años en documentarse para escribir estas obras. Su novela, "El Silencio de los Corderos", además de ganar varios premios literarios, se convirtió en un éxito de ventas, lo que ayudó a que muy pronto fuese adaptada a la pantalla

            El actor Gene Hackman y la productora "Orion Pictures" se hicieron con los derechos de la novela por 500.000$. Hackman que llevaba 30 años interpretando papeles, se disponía a debutar como director. Lo primero que hicieron fue contratar a Ted Tally para que escribiera el guion.

            No está muy claro si fue cosa de la hija de Hackman que, tras leer el libreto, convenció a su padre para que abandonara la idea de rodar "esa historia tan escabrosa y terrorífica", el caso es que el actor cedió gratuitamente su parte de los derechos y "Orion Pictures" se convirtió en amo y señor de todo el proyecto
 

            "Orion Pictures" que contaba en su catálogo con éxitos como "Amadeus"(1984), "Platoon"(1986) y "Bailando con Lobos"(1990)(Ver Cartelería en AGOSTO 2019) estaba al borde de la bancarrota. La productora intentó jugar sobre seguro y decidió asignar la dirección del film a Jonathan Demme que con sus dos últimas películas: "Algo Salvaje"(1986) y "Casada con Todos"(Married to the Mob, 1988) había contribuido a sanear las maltrechas cuentas de la productora.

            A Demme en un principio, no le hacía ninguna ilusión hacer una peli sobre un asesino en serie, pero cuando leyó la novela de Harris y el guion de Ted Tally, supo de inmediato que tenía entre manos la posibilidad de "hacer un film increible, aterrador como ningún otro".

GREG RUTH

            Lo primero que vio el director fueron las posibilidades que ofrecía el personaje de la agente Clarice Starling, en la mejor tradición de las mujeres aguerridas en situaciones difíciles que tanto le habían ayudado en sus películas. Desde sus inicios al amparo de Roger Corman en películas de serie B como "Cárcel Caliente"(1974) y "Tres Mujeres Peligrosas"(Crazy Mama, 1975) hasta producciones posteriores como "Chicas en Pie de Guerra"(Swing Shift, 1984), Jonathan Demme siempre mostró gran debilidad por las chicas de armas tomar

ESPAÑA

            La idea que Demme había forjado de su protagonista era la de una mujer joven, atractiva, inteligente y provista de una gran fuerza interior, lo que encajaba a la perfección con las cualidades de Michelle Pfeiffer, actriz con la que había trabajado en su anterior film "Casada con Todos" y a la que le ofreció el papel sin dudar.

            A Michelle le apetecía mucho volver a colaborar con el director, pero cuando leyó el guion, quedó aterrorizada con el tema tratado y desestimó la propuesta. Según las malas lenguas de la prensa de Los Ángeles, lo único que aterrorizó a Michelle Pfeiffer para apearse del proyecto fue comprobar que en el cheque que se le ofrecía figuraba una cantidad considerablemente inferior a los 2.000.000$ que quería cobrar por hacer el film

NICK CHARGE

             Cuando Jodie Foster leyó por primera vez la novela de Thomas Harris, trató de comprar los derechos ella misma, pero se encontró con que Gene Hackman se le había adelantado.

            Foster que acababa de ganar el Oscar por "Acusados"(1988) se reunió con el guionista Ted Tally con la excusa de saber si estaría interesado en colaborar con ella en un film sobre la vida de Jean Seberg, una "milonga" que la actriz le contó para cerciorarse de algo que ella ya sabía: que Tally estaba trabajando en la adaptación de "El Silencio de los Corderos". El guionista rechazó la oferta porque le dijo que estaba escribiendo el guion para una película que iba a dirigir Jonathan Demme.

            Así que con esta información Jodie Foster se fue directamente a entrevistarse con el director
 

POLONIA

            Jonathan Demme recibió a la actriz por pura cortesía y tras la charla que mantuvieron, Foster le dijo que si surgía algún problema con la persona que el director había pensado para el papel de Clarice, ella estaba "bastante" interesada en hacerlo. Su ofrecimiento fue tenido en cuenta cuando Meg Ryan, la segunda opción del director, también rechazó el papel

ALEMANIA

            Para dar vida al Dr. Hannibal Lecter la primera elección fue Sean Connery pero rechazó el papel. Tras la negativa del actor escocés y aunque cueste creerlo la siguiente opción fue Louis Gossett jr. que había ganado el Oscar por su papel de sargento instructor en "Oficial y Caballero"(1982), sin embargo cuando "Orion Pictures" se puso a valorar las repercusiones que podría acarrearles el hecho de caracterizar a un personaje canibal con los rasgos de un actor negro, descartaron la ocurrencia.

            Por lo menos sacaron en claro que Lecter tenía que interpretarlo un actor blanco, caucásico, y  fue Jeremy Irons el siguiente actor a quien le ofrecieron el papel. Irons, que terminaba de rodar "El Misterio Von Bulow"(Reversal of Fortune, 1990), también rechazó el personaje porque no tenía ningún interés en interpretar a otro tipo malo

DAVIDE MORETTINI

            Menos Irons y Connery, todo Hollywood quería hacerse con el papel de Hannibal Lecter. La lista de actores considerados es tan extensa que tan solo citaré a tres: Hoffman, Nicholson y De Niro. 

            Al final el elegido fue Anthony Hopkins, una brillante decisión porque desde el principio, el actor se involucró en la producción para enriquecer a su personaje más alla del descrito en la novela aportando interesantes matices que ni tan siquiera aparecían en el guion, y empezó por una de las características imprescindibles en el cine (sonoro) e inexistentes en el libro: la voz.

            Hopkins reflejó la controlada locura de su personaje modulando una voz que, según él, era una mezcla entre la del escritor Truman Capote y la de la actriz Katharine Hepburn con la que había trabajado en "El León en Invierno"(1968)
 

CRQSF

            También se sacó de la manga ese inquietante y grotesco sonido de sorber sesos que no estaba en el guion. 

            Imaginó a Lecter como una especie de reptil. Los reptiles solo parpadean cuando quieren y lo hacen conscientemente. En la peli, Lecter solo parpadea en momentos especiales y muy conscientemente. 

            Sin duda, el actor demostró tener las claves para mejorar considerablemente tanto aspectos de la interpretación como de la producción en general

COREA

            Fue Hopkins también quien convenció a Jonathan Demme y a la diseñadora de vestuario Colleen Atwood de que su personaje parecería más clínico e inquietante vestido de blanco inmaculado, en lugar de ir con un mono amarillo o naranja como estaba planificado en el guion. Según el actor, esa idea le surgió del miedo que siente por los dentistas

JAMES RHEEM DAVIS

            En la primera escena juntos, Hannibal Lecter se burla del acento rural sureño de Clarice. Hopkins lo improvisó en ese momento mientras se rodaba la secuencia. A Jodie Foster no le gustó esa burla ya que no estaba en el guion, de hecho lo sintió como un ataque a su persona y su expresión de malestar que aparece en el film, es completamente real porque fue la toma que quedó en la película.

            Evidentemente, la actriz agradeció la improvisación de su compañero felicitándolo por provocarle esa reacción tan espontanea que mejoraba su interpretación
 

LAURENT DURIEUX

            Scott Glen se hizo con el papel de Jack Crawford, el mentor y agente al mando de Clarice en el F.B.I. Un personaje para el que fueron considerados Michael Keaton, Mickey Rourke, Kenneth Branagh y Ed Harris.

            El resto del reparto principal se completó con Anthony Heald (Dr. Chilton), Ted Levine (Jame Gumb) y Brooke Smith (Catherine Martin).

            Jonathan Demme contó con un presupuesto de 19.000.000$ que la película recuperó en su primera semana de exhibición.

            El rodaje se realizó entre el 15 de noviembre de 1989 y el 1 de marzo de 1990 en uno de los inviernos más fríos que se recordaban en Pittsburgh (Pensilvania), donde se rodó casi toda la película

FRANCIA

            El director confió de nuevo en Tak Fujimoto, su inseparable director de fotografía y en la diseñadora de producción Kristi Zea que venía de trabajar con Scorsese en "Uno de los Nuestros"(Goodfellas, 1990)(Ver Cartelería en MARZO 2021).

            Howard Shore compuso una partitura que transmite una mezcla de inquietud, tenebrismo y suspense muy eficaz para acompañar las turbadoras imágenes del film
 

TAILANDIA

            La premiere fue en Nueva York el 30 de enero de 1991 y al mes siguiente, el 14 de febrero se estrenó la película en 1.497 cines de Estados Unidos.

            El estreno en España fue el 6 de septiembre de ese mismo año

HOLLAND JACKSON

            La calavera de la polilla que hay dibujada en algunos carteles de la película, está sacada de "In Voluptas Mors" una de esas fotografías surrealistas que se le ocurrían a Salvador Dalí y que su amigo, el fotógrafo Philippe Halsman realizaba. En ella se ve a Dalí de pie junto a un grupo de siete mujeres desnudas que componen la forma de un craneo humano.

            "El Silencio de los Corderos" rompió el viejo tabú de Hollywood de no otorgar los Oscars principales a películas de terror. El film ganó las 5 estatuillas más importantes: Mejor película, director, actor, actriz y guion. Este logro antes solo lo habían conseguido dos películas: "Sucedió una Noche"(1934) de Frank Capra y "Alguien Voló sobre el Nido del Cuco"(1975) de Milos Forman
 

RUIZ BURGOS

            En fin, Paul Verhoeven declaró que le ofrecieron la dirección del film y que lo rechazó porque pensó que no habría público para una película tan oscura. Personalmente, me alegró de que lo hiciera porque esta peli en sus manos hubiera sido mucho más escatológica, sangrienta y desagradable. Y esto lo digo porque independientemente de las grandes interpretaciones del reparto, la gran virtud de esta película es la contención y sutileza que Jonathan Demme adopta a la hora de contarnos esta historia tan truculenta, sin caer en las formas fáciles del género, es decir: el exceso de imágenes violentas y de hemoglobina.

            "El Silencio de los Corderos" no es un simple film de terror. Aborda temas como la problemática de ser una mujer en un mundo de hombres, la dualidad entre bestia y hombre existente en el ser humano y por supuesto, la fascinación que sentimos por el mal y todo eso lo hizo Jonathan Demme con una puesta en escena en la que se sugiere mucho más de lo que se muestra. Chapeau.

 

 

                                                   Hasta la próxima