sábado, 29 de junio de 2024

B.S.O. de "SE7EN" - Closer (Títulos de Crédito) - Nine Inch Nails

SEVEN (Se7en, 1995)

 

CARTELERÍA


            David Fincher nació en Denver en 1962. Cuenta que tras ver “Dos Hombres y Un Destino” (Butch Cassidy and The Sundance Kid, 1969) supo que se dedicaría a hacer películas. Con 19 años ya estaba trabajando en “ILM” (Industrial Light & Magic) la empresa de efectos especiales propiedad de George Lucas. Muy pronto dio el salto a la publicidad, realizando spots para prestigiosas marcas y videos musicales para cantantes y grupos de primer nivel

            Su primer largometraje fue “Alien3”(1992), una peli que no tuvo el éxito de taquilla esperado, sobre todo, porque los productores se gastaron lo que no estaba escrito (50.000.000$) y porque James Cameron, en la anterior película de la saga “Aliens:  el regreso”(1986) había dejado en pabellón muy alto

            Este fracaso taquillero en su primera incursión cinematográfica sumió a Fincher en una gran depresión, planteándose muy seriamente abandonar la dirección de films y centrarse únicamente en la realización de videos musicales y spots publicitarios. De hecho, estuvo casi dos años sin querer leer un guion cinematográfico 

             Andrew Kevin Walker trabajaba en Nueva York como dependiente en una de las tiendas de música de la cadena “Tower Records”. Mal pagado y casi depresivo malvivía escribiendo en sus ratos libres guiones con el fin de colocárselos a alguna productora. Había estado dos años trabajando en el guion de un thriller psicológico de tintes lúgubres y desoladores donde un asesino en serie mataba a sus víctimas inspirándose en los siete pecados capitales 

            El libreto estuvo dando tumbos por varias productoras hasta que “New Line Cinema” lo compró.

            Al primer director que le ofrecieron el proyecto fue a David Cronenberg que, incomprensiblemente rechazó la oferta. Luego fue Guillermo del Toro el elegido, pero el realizador mexicano tampoco quiso hacerse cargo de la dirección del film

            Tras estas dos negativas, el guion terminó llegando a las manos de David Fincher que tras su lectura pensó que el mejor enfoque era plantear el film como una “meditación sobre el mal” en lugar de hacer una “Buddy Movie” o peli sobre policías coleguitas tipo “Arma Letal” (Lethal Weapon, 1987) que en manos de otro director, lamentablemente sería en lo que se podría haber  convertido

             Las primeras opciones para protagonizar la película fueron Al Pacino para el papel del veterano detective William Somerset que terminó interpretando Morgan Freeman, mientras que para el novato e impulsivo David Mills (Brad Pitt) pensaron en Derzel Washington. Ambos actores rechazaron el ofrecimiento y tanto uno como el otro, tras ver el film,  declararon su pesar por no haber aceptado este trabajo 

ALEMANIA

            Antes de que Freeman se hiciese con el papel, el personaje fue ofrecido a un buen puñado de extraordinarios actores: William Hurt, Gene Hackman, Robert Duvall y Harrison Ford.

            El detective Somerset interpretado por Morgan Freeman es una de las inolvidables creaciones del actor. Un policía inteligente, culto, metódico y ordenado. Un tipo frío y experimentado asqueado de toda la podredumbre que tiene que presenciar cada día durante sus inacabables jornadas laborables

JAPÓN

            Por otro lado, el detective Mills es un tipo duro, un joven que se quiere labrar una brillante carrera limpiando las calles de escoria delictiva. Un policía nuevo en la ciudad que rápidamente se da cuenta de lo mucho que puede aprender de su compañero. Brad Pitt bordó su interpretación,  involucrándose completamente en el proyecto y aportando muchas ideas durante la producción.

            El actor cobró 7.000.000$ por su trabajo interpretando un personaje para el que se barajaron también los nombres de Sylvester Stallone, Kevin Costner y Nicolas Cage 

            Al contrario de sus compañeros de reparto, Gwyneth Paltrow sí fue la primera opción para dar vida a Tracy, la esposa de Mills. En un principio, la actriz rechazó el trabajo y entonces “New Line Cinema” pensó en ofrecerle el papel a Christina Applegate pero David Fincher pensaba que era un personaje hecho a la medida de Paltrow y le pidió a Brad Pitt que convenciera a la actriz. Pitt convenció a Paltrow que también está sensacional en la peli y durante el rodaje se convirtieron en la vida real, en una de las parejas más populares del Hollywood del momento

ESPAÑA

            Por increíble que parezca, la primera opción para interpretar el rol de John Doe, el asesino en serie que lleva de cabeza a la pareja de detectives, fue Michael Stipe, el cantante de R.E.M. (me encanta R.E.M. pero la verdad es que no se qué se habían fumado los ejecutivos de New Line Cinema esa mañana). Afortunadamente Stipe rechazó el trabajo.

            Val Kilmer también rechazó el papel 

            R. Lee Ermey al que todos recordamos por su papel de sargento instructor en el film de Stanley Kubrick “La Chaqueta Metálica” (Full Metal Jacket, 1987) audicionó para el papel de John Doe. Fincher no quedó totalmente satisfecho y siguió probando a otros actores. Aun así, Ermey se quedó en la película interpretando al jefe de la policía.

            Cuando Kevin Spacey hizo la prueba todas las dudas quedaron disipadas, él tenía que hacer de John Doe. El problema vino cuando la productora dijo que no había dinero para pagar el salario que pedía el actor. La tenacidad de Brad Pitt para conseguirle el papel a Spacey fue lo que finalmente convenció al estudio. Los productores dieron el visto bueno dos días antes de comenzar el rodaje

BRASIL

            Un rodaje que David Fincher realizó, a pesar de los accidentes, en tan solo 55 días, entre el 12 de diciembre de 1994 y el 5 de febrero de 1995.

            Durante la escena que Mills persigue a John Doe bajo la lluvia, Brad Pitt resbaló en el capó de un coche y cayó sobre el parabrisas atravesándolo con el brazo. Se rompió el brazo y le tuvieron que dar casi 100 puntos de sutura, lo que Fincher aprovechó para incluir el accidente en el argumento y así justificar el aparatoso vendaje que el actor lleva en el brazo durante buena parte del metraje

ITALIA

            Además, el motivo de que en la peli llueva todos los días exceptuando el último, es porque Brad Pitt se había comprometido para el rodaje de “12 Monos”(1995), por lo que empezaron a rodar todas las escenas en las que aparecía el actor y coincidió que todas esas primeras jornadas de rodaje estuvo lloviendo, así que la razón fue más de tipo logístico que argumental.

            En ningún momento se dice el nombre de la ciudad donde se desarrolla toda la acción del film, pero se supone que es Nueva York. Aunque la peli se rodó en Lancaster y Los Ángeles (California)

JAMES RHEEM DAVIS

            David Fincher es un perfeccionista al estilo de Stanley Kubrick, un tipo al que no le importa rodar las escenas infinidad de veces hasta que considera que tiene la toma perfecta. Un creador de atmósferas impresionante que cuida el detalle hasta el límite; recuerdo por ejemplo el del apartamento todo lleno de ambientadores colgados del techo, detalles que como digo, pueden pasar desapercibidos en un primer visionado pero que aportan una gran verosimilitud al relato que nos muestra

CHINA

            En “Se7en” también le gusta jugar con el simbolismo. El número 7 está siempre rondando durante todo el metraje. Toda la acción del film se desarrolla en 7 días; en la primera escena que comparten los dos detectives, van caminando por una calle en la que todos los números de los portales empiezan por 7; hay tomas aéreas en que la forma de los edificios es un 7; 7 son los pecados capitales en los que se basa toda la trama del film…

ARGENTINA

            David Fincher contó con un presupuesto de 33.000.000$ y se rodeó de un equipo técnico extraordinario.

            El diseño de producción fue asignado a Arthur Max, habitual colaborador de Ridley Scott en títulos como “Gladiator”(2000).

            El espectacular montaje con el que cuenta el film fue obra de Richard Francis-Bruce, un tipo que ya había mostrado su maestría en films como “Cadena Perpetua” (The Shawshank Redemption, 1994) por la que fue nominado al Oscar

ALEKSANDER WALIJEWSKI

            También contó con la inestimable ayuda del director de fotografía Darius Khondji que utilizó un original tratamiento de imagen que otorga al film una oscuridad y unos tonos azules y verdosos que van perfectos para la historia sórdida y macabra que Fincher nos está contando.

            Para el vestuario eligió a Michael Kaplan, un veterano que había empezado su carrera diseñando el vestuario de “Blade Runner”(1982) y que a partir de su trabajo en “Se7en” ha sido uno de los colaboradores habituales de Fincher en todos sus films. 

            La música corrió a cargo de Howard Shore, el compositor de la partitura de “El Silencio de los Corderos”(1991) y de la saga de “El Señor de los Anillos” 

CHANGETHETHINK STUDIO

            La película tuvo un preestreno en Nueva York el 15 de septiembre de 1995 y el estreno oficial en Estados Unidos fue una semana después, el 22 de septiembre.

            En España se estrenó el 10 de enero de 1996.

            Fue todo un éxito de taquilla que recaudó más de 300.000.000$, originando muchos films de asesinos en serie que, sinceramente, no le llegan ni a la altura de los tobillos al film de David Fincher.

            En fin, viendo ya los impactantes títulos de crédito con los que comienza el film, con esa inquietante música de "Nine Inch Nails",  podemos adivinar que estamos ante una película muy, pero que muy… original.

            El film de David Fincher  cuenta además con uno de los mejores guiones de los 90, cerrado con una secuencia final impactante, rodada y montada tan perfectamente que tendría que estudiarse en las escuelas de cine.  Y si a eso añadimos una solvente actuación de los actores, unos brillantes diálogos y la labor de un director que cuida hasta el más mínimo detalle de la producción, creo que bien puedo decir que “Se7en” es un peliculón como la copa de un pino.






                                                       Hasta la próxima













miércoles, 29 de mayo de 2024

SECUENCIAS MÍTICAS: UN DÍA EN LAS CARRERAS (Sam Wood, 1937) - El Dr. Hackenbush volviendo loco al administrador Whitmore

UN DÍA EN LAS CARRERAS (A Day at the Races, 1937)

 

CARTELERÍA


            En 1934 los hermanos Marx desembarcaron en Metro-Goldwyn-Mayer bajo la tutela del productor Irving Thalberg. El éxito no se hizo esperar y con su primera película en el estudio: “Una Noche en la Ópera”(1935) alcanzaron una popularidad que hasta entonces no habían logrado

            Muchos de los ejecutivos de la “Metro” clamaron por poner rápidamente en marcha una segunda película, pero Thalberg que además de saber mucho de cine,  era un tipo muy inteligente planteó razones lo suficientemente convincentes para mantener un compás de espera de algo más de un año para empezar a trabajar en la que sería la séptima peli de los Marx: “Un Día en las Carreras”

            Mientras tanto Groucho, Chico y Harpo disfrutaban del sol de California gastando el dinero ganado gracias al suculento porcentaje del 15% de los beneficios generados por la taquilla de su anterior film

            Thalberg puso a trabajar a un ejército de guionistas para dar forma al argumento del film. Se llegaron a realizar hasta 18 guiones y aunque finalmente,  en los créditos del film, aparecen tres guionistas: Robert Pirosh, George Seaton y George Oppenheimer, hay que reconocer la importante aportación de Al Boasberg en muchos de los sketchs de la película

            Por ejemplo el de la famosa escena de “al rico helado de tutti-frutti” en la que Chico le vende a Groucho un montón de libros imprescindibles para apostar en las carreras y que si no está a la altura de la de “la parte contratante de la primera parte” de “Una Noche en la Ópera”, poco le falta. Una escena tan bien escrita sobre el papel que ninguno de los dos hermanos modificó ni improvisó nada.

            George S. Kauffman, uno de los mejores comediógrafos del siglo XX y colaborador habitual en muchos de los trabajos de los Marx, fue el encargado de dar unidad al batiburrillo de guiones

            Utilizar un sanatorio como centro neurálgico para los desvaríos de los Marx fue idea de Pirosh y Seaton.

            Irving Thalberg eliminó una de las primeras escenas escritas para presentar a Groucho y a Margaret Dumont. La secuencia se desarrollaba en una convención de psicoanalistas en la que Groucho declaraba que el mayor problema que afectaba a la profesión era la falta de nuevas enfermedades. Luego empezaba a describir los síntomas de padecía la señora Dumont con tal lujo de detalles desagradables que a la pobre mujer, terminaba dándole un patatús. Entonces Groucho preguntaba si había algún médico entre los asistentes y cuando uno de ellos levantaba la mano, Groucho ordenaba  que fuera inmediatamente expulsado de la sala.

            A mí me parece buenísima, pero Thalberg pensó que era un humor demasiado sutil para el tipo de público al que iba dirigido el film

BÉLGICA

            En los primeros borradores del guion, el personaje de Groucho se llamaba Dr. Quackenbush, un nombre que era un juego de palabras entre curandero, charlatán y arbusto lo suficientemente tonto para ofender a alguien, o por lo menos eso pensaban en el departamento legal de “La Metro” hasta que comprobaron el listín telefónico y se dieron cuenta que había como una docena de médicos estadounidenses con ese nombre

ESPAÑA

            Así que para evitar denuncias, decidieron cambiar el nombre del personaje a Dr. Hackenbush, sin duda un buen apellido para un veterinario, ya que “Hack” se puede traducir por rocín o jamelgo.

            Groucho siempre citó al Dr. Hackenbush como su personaje favorito de todos los que había interpretado, tanto es así que estuvo muchos años firmando sus cartas personales con el nombre de Hugo Z. Hackenbush

FRANCIA

            La pareja romántica que acompaña a los Marx en esta ocasión estuvo formada por Allan Jones, que ya había sido el galán en “Una Noche en la Ópera” y por Maureen O’Sullivan, la inolvidable Jane compañera del Tarzán Weissmüller, esposa del director John Farrow y madre de Mía Farrow, la mamá de “La Semilla del Diablo” (Rosemary’s Baby, 1968)

SERBIA

            Como en casi todas sus películas, los Marx estuvieron arropados por un extraordinario plantel de actores secundarios.

            Margaret Dumont volvía a acompañar a los Marx en esta aventura. Groucho decía de ella que era el quinto hermano Marx y tenía mucha razón en ello, porque la actriz sacrificó su carrera para ser el blanco de la locuacidad de Groucho, al que ponía en bandeja las frases justas para que él se luciese.

             La actriz trabajó en siete de las trece pelis de los Marx y su recuerdo permanecerá siempre unido a ellos 

AUSTRIA

             Douglas Dumbrille, el Mohammed Khan de “Tres Lanceros Bengalíes”(1935), es también aquí el malo de la función, como casi siempre. Dumbrille fue un magnífico secundario con una carrera de más de 200 papeles entre cine y TV. 

             Sig Rumann que ya había interpretado al empresario Gottlieb en “Una Noche en la Ópera” da vida al Dr. Steinberg, contratado por el administrador del sanatorio para desenmascarar al Dr. Hackenbush. Rumann al que muchos recordamos por sus papeles en films como “Solo los ángeles tienen alas”(1939), “Ninotchka”(1939) y “Ser o no ser”(1942) volvió a trabajar con los Marx en “Una noche en Casablanca”(1946).

             Leonard Ceeley dando vida al administrador Whitmore y Esther Muir como Flo “La Vampiresa” completan el reparto principal del film 

ESPAÑA

            Como “Una Noche en la Ópera” les había salido tan bien, “La Metro” volvió a asignar las labores técnicas a buena parte del mismo equipo.

            Sam Wood volvió a repetir en la dirección, el buen hombre ya estaba curado de espantos y sabía de sobra a lo que se enfrentaba en este nuevo rodaje. 

            La fotografía corrió a cargo de Joseph Ruttenberg, toda una garantía para mantener el nivel exigido por el estudio.

           En la dirección artística contaron con otro monstruo: Cedric Gibbons, uno de los mejores profesionales con los que contaba “el estudio del león”. Ganador de 11 Oscars y responsable de los decorados de películas como: “Los Tres Mosqueteros”(1948), “Quo Vadis”(1951) y “Julio César”(1953) 

AUSTRALIA

           Antes de comenzar a rodar, los Marx salieron de gira por varias ciudades del país para probar ante el público la eficacia de los números humorísticos preparados en el guion. Todos los días, Al Boasberg reescribía algunas escenas en función de cómo hubiera reaccionado el público. 

            El rodaje comenzó el 3 de septiembre de 1936, el día 8 Irving Thalberg pilló un catarro que se convirtió en una neumonía ocasionando su repentino fallecimiento el 14 de septiembre a la edad de 37 años. El mundo perdió a uno de los mejores productores de la Historia y los Marx perdieron a su más fiel valedor dentro del estudio y al hombre que había impulsado su carrera hasta convertirlos en estrellas

BÉLGICA

            Tras la muerte de Thalberg, el rodaje no se reanudó hasta el 21 de diciembre. Fue un rodaje complicado con retrasos por el mal tiempo, una epidemia de gripe y algún que otro accidente como una lesión en el hombro que sufrió Harpo al caerse de un caballo.

            Chico Marx raramente aparecía por los ensayos y se puede comprobar en la secuencia que toca el piano con la orquesta. Resulta que durante los ensayos, agregaron un pequeño solo de flauta en varios compases de la canción. Como Chico no iba a ensayar, pues no lo sabía en el momento que rodaron la escena. Si os fijáis, se le puede ver mirando sorprendido durante su interpretación y sonriendo mientras continua tocando la pieza.

            Finalmente, la filmación terminó el 2 de abril de 1937

ALEMANIA

            
Franz Waxman, célebre compositor de la música de films como “Rebeca”(1940) y “El Crepúsculo de los Dioses” (Sunset Blvd., 1950), asumió la dirección musical de la película.

            La música de las canciones está compuesta por Bronislau Kaper y Walter Jurmann con letras de Gus Khan. En las pelis de los Marx, la música siempre alcanza unas altas cotas de calidad y las canciones, una categoría muy particular.

            En este film, escuchamos entre otras: La Obertura de la Rapsodia Húngara de Franz Liszt, el Preludio en Do sostenido menor de Rachmaninoff…  Allan Jones canta una bonita balada titulada “Tomorrow is Another Day”, Chico se toca al piano: “On the beach at Bali-Bali” y Groucho se baila el Danubio Azul de Johann Strauss  y “La Cucaracha”

ESPAÑA

            Pero si hay un número musical que alcanza mayor relevancia, ese es el cantado por Ivie Anderson y los Crinoline Choir: “All God’s Chillun Got Rhythm”.

            La secuencia se filmó en marzo de 1937 y comienza con Harpo tocando con un flautín la canción “Who Dat Man” en un poblado de chabolas ocupado por humildes familias de afroamericanos.

            El número contiene la que es sin duda una de las mejores exhibiciones de baile “Lindy Hop” de la Historia. Fue la primera vez que los “Whitey’s Lindy Hoppers” aparecieron como grupo oficial en un film de Hollywood.

            Fundado en 1932 por Herbert “Whitey” White, el grupo contaba con los mejores bailarines de “Lindy Hop” del momento, dirigidos por Frankie Manning, líder y coreógrafo del grupo

            El estreno en Estados Unidos fue el 11 de junio de 1937 y en España se estrenó el 26 de diciembre de 1939. 

            Con una duración de una hora y cincuenta minutos, es la película con mayor metraje de los Marx, la única que consiguió una nominación al Oscar y la que más dinero recaudó en el momento de su estreno. 

            En la versión en castellano que podemos ver actualmente, se nombra a Brigitte Bardot, a Fidel Castro, al motor Barreiros… se cantan canciones como “El Telegrama” y “María” de “West Side Story”(1961)…  una larga lista de anacronismos que pueden “chirriar” un poco en un film de 1937. Digamos que son licencias que se tomaron durante el doblaje de 1961. 

            Además de la ya mencionada escena de “al rico helado de tutti-frutti”, la peli contiene infinidad de secuencias inolvidables como: la del reconocimiento médico de la Sra. Upjohn (Margaret Dumont), la de la conversación telefónica en que el administrador intenta comprobar el historial del Dr. Hackenbush,  la que Chico y Harpo empapelan a la rubia malvada…

            En fin, si Irving Thalberg no hubiera muerto, la peli no hubiera sido tan larga y seguramente habría sido mejor, pero aun así, para los amantes del cine clásico y del humor absurdo merece la pena ver una y otra vez cualquiera de las películas protagonizadas por estos tres tipos siempre en batalla contra el sentido común.






                                                     Hasta el mes que viene















UN DÍA EN LAS CARRERAS.